El Gobierno, a través del Ministro de Hacienda y Administraciones Públicas, confirmó los datos de cierre del ejercicio pasado que ya advertían de una mejora del balance de ejecución presupuestaria. Así, el conjunto de las Administraciones cerró el pasado ejercicio con un déficit de 70.822 millones, lo que representa el 6,74% del PIB.
La comparación entre los tres niveles administrativos muestra, dentro de la evolución positiva general, un resultado más que favorable para la Administración más cercana al ciudadano. Mientras que el Estado terminó el año con un déficit del 3,83% sobre el PIB y las Comunidades Autónomas con el 1,73%, las Entidades Locales quedaban con el 0,20% mencionado antes.
Cristóbal Montoro alabó el esfuerzo “extraordinario” realizado por las Corporaciones Locales y Comunidades Autónomas y señaló que los datos "ponen de relieve como gracias al esfuerzo de la sociedad española, tanto de los ciudadanos como de sus administraciones, se ha logrado un importante avance en la credibilidad de las cuentas españolas y en la recuperación de la confianza".
Titánico esfuerzo
Como es lógico, el Presidente de la FEMP, Íñigo de la Serna, elogió nada más conocerse la noticia el “titánico esfuerzo” de los Ayuntamientos y puso de manifiesto que el dato de déficit de las Entidades Locales demuestra su férreo compromiso con la sostenibilidad de las finanzas del país.
El Alcalde de Santander mostró su satisfacción porque el Estado en su conjunto haya cerrado 2012 con un déficit del 6,74% y, al mismo tiempo, destacó que las Corporaciones Locales hayan vuelto a ser la Administración que más y mejor ha cumplido con el objetivo que se le había impuesto.
De la Serna también ensalzó y agradeció a todos los Alcaldes y Concejales de España el “gran trabajo que han realizado para equilibrar sus cuentas y para sanear sus Corporaciones en unos momentos realmente complicados para todos”.
En este sentido, recordó que en tan solo un año las Entidades Locales han rebajado a la mitad el déficit y subrayó que el esfuerzo ha merecido la pena porque servirá “para sentar las bases de la recuperación de España y para acabar con la destrucción de empleo”.