FEDERACION ESPAÑOLA DE MUNICIPIOS Y PROVINCIAS

La conferencia, fue presentada por el Diputado Pere Macías y moderada por el periodista Francisco Marhuenda, se celebró el pasado febrero. En su intervención, Salvador Esteve, miembro de la Comisión Ejecutiva de la FEMP, respondió defendiendo la autonomía local ante quienes proponen recortar el trabajo y la responsabilidad de Ayuntamientos y Diputaciones señalando que “es una equivocación, ya que los tres niveles de Administración sobre los que está diseñado el Estado no son fruto de la improvisación”, sino una fórmula que se ha demostrado eficaz a lo largo de décadas. Por ello hizo un llamamiento para que “la economía no ciegue a la política y nos convierta en cortos de vista, porque el sentido de la identidad y la pertenencia territorial en el ámbito local están muy arraigados”.

Asimismo, afirmó que una reestructuración o una concentración institucional, como algunos piden ruidosamente, hecha a espaldas y en contra de la autonomía del mundo local, desembocaría en un nuevo centralismo; y eso sería inaceptable, porque “el reparto territorial de poderes, el principio de proximidad y la autonomía local no son valores obsoletos”. Y añadió  que “lo que se puede hacer ante la crisis es dar un paso adelante en la racionalización y en la mejora de la eficiencia de nuestra arquitectura institucional, estatal, autonómica y local.”

El Presidente de la Diputación de Barcelona se refirió también en su intervención a los Alcaldes, especialmente aquéllos que están al frente de municipios pequeños y medianos “que compaginan de manera ejemplar su actividad privada con el ejercicio de su responsabilidad pública”; y añadió que “si hubiese que pagar el trabajo de cientos de Alcaldes y Concejales en función de los resultados de su gestión hacia los ciudadanos, no habría dinero suficiente para hacerlo”.

Esteve finalizó indicando que, en tiempos de crisis, “los Ayuntamientos no pueden bajar la persiana” como han hecho muchas empresas y negocios, porque “los ciudadanos siguen llamando a sus puertas; es un momento en el que las instituciones han de afrontar mayores responsabilidades con menos recursos. Y es en este contexto, señaló, donde el papel de los Gobiernos Locales intermedios, como las Diputaciones, tienen un papel más relevante que nunca, ya que “son un instrumento clave para garantizar los servicios públicos municipales, para hacerlos viables y para darles continuidad”. Por ello, afirmó con rotundidad, “suprimir las Diputaciones supondría, con toda seguridad, un golpe mortal a la supervivencia de numerosos Ayuntamientos”.

A título de ejemplo, se refirió a la Diputación que preside; de ella dijo que se ha especializado en la cooperación municipal, a través del apoyo  a programas de servicio público de los propios Ayuntamientos y de asistencia técnica para facilitar su gestión diaria, un trabajo que es posible gracias a la especialización técnica y a la utilización de economías de escala”.