FEDERACION ESPAÑOLA DE MUNICIPIOS Y PROVINCIAS

El Pacto de Alcaldes es un movimiento de ámbito europeo en el que se agrupan Autoridades Locales y Regionales comprometidas con la eficiencia energética y las fuentes de energía renovables. El Hemiciclo del Parlamento Europeo, en Bruselas, acogía a finales del pasado noviembre la celebración de su tercera Asamblea anual y, con ello, daba oportunidad a una renovación del compromiso de más de 3.000 Alcaldes y a la incorporación de 263 nuevos que, en nombre de sus ciudades, vinieron a respaldar una apuesta por la reducción de las emisiones de CO2 antes de 2020 –una meta que supera los objetivos de la UE-.

En la actualidad, y con las nuevas adhesiones, el Pacto cuenta con 3.257 firmantes; entre ellos, figuran 892 Alcaldes españoles que, con su compromiso, han convertido a nuestro país en el segundo “localmente” más implicado en sostenibilidad energética –el primero es Italia, con 1.570 Alcaldes-. En total, la población europea representada en el Pacto supera los 140 millones de personas.

En su tercera Asamblea General, los asistentes pasaron revista a los resultados favorables que ciudades como Sarajevo, Génova o Bucarest han obtenido en el desarrollo de sus economías locales con acciones en materia de energía sostenible. Vitoria, Capital Verde Europea de 2012, y referente por esta capitalidad, fue otra de las protagonistas en Bruselas; su Alcalde, Javier Maroto, participó en una mesa de discusión sobre “Ciudades inteligentes y comunicación: investigación en innovación y tecnología” y protagonizó, junto a la Ministra de Medio Ambiente de Bruselas Capital, Evelyne Huytebroeck, la firma de una declaración de apoyo a los delegados europeos en el COP-17 (Convención de la ONU sobre Cambio Climático de Durban). Huytebroeck añadió que “nosotros, los representantes de las ciudades europeas estamos dispuestos a asumir nuestra parte de responsabilidad y a luchar contra el cambio climático. Sólo esperamos que los Estados hagan lo mismo”.

En Bruselas también estuvo el Alcalde de Lorca, Francisco Jódar, que junto con los Alcaldes de Mostar (Bosnia Herzegovina), Ljubo Beslic, y L’Aquila (Italia), Máximo Cialente, comparte la responsabilidad de dirigir municipios afectados por catástrofes y destrucción. Los tres ediles presentaron en la Asamblea el proyecto de recuperación de sus ciudades, basado, en todos los casos, en criterios de sostenibilidad y participación, con el que optarán al programa europeo “Smart Cities”. Se trata de un programa de rehabilitación de ciudades destrozadas (en el caso de Mostar, por la guerra, y en el de Lorca y L’Aquila, por sendos terremotos) en el que se promueve un desarrollo integral que incluye tanto la rehabilitación de edificios con criterios de máxima eficiencia energética, y la puesta en marcha de energías limpias y mejoras de la movilidad sostenible, entre otras pautas. Los tres Alcaldes aprovecharon su presencia en el organismo europeo para hacer entrega de su proyecto al Comisario de Energía de la Unión, Günther Ötinger.

La colaboración con otras ciudades europeas y el aprendizaje a través de sus prácticas fueron algunas de las líneas de trabajo que apuntó en su intervención otra de las españolas presentes, la Alcaldesa de Gijón, Carmen Moriyón. Moriyón, una de las nuevas firmantes del Pacto y, en su caso, con la particularidad especial de ser la firmante número 3.000 –lo que convierte a Gijón en “Ciudad 3.000 del Pacto”-, señaló que su municipio “tiene una agenda ambiciosa para impulsar el desarrollo sostenible local y reforzar su cooperación internacional. “En vez de buscar soluciones innovadoras de manera individual, creemos que es mucho mejor trabajar con otras ciudades europeas y aprender a través de sus experiencias” subrayó a la hora de explicar las motivaciones que la llevaron a suscribir el Pacto.

Esfuerzo inversor

A pesar de las graves dificultades con las que se enfrentan los responsables locales, el conjunto de las ciudades firmantes del Pacto de Alcaldes ha conseguido asignar más de 40.000 millones de euros al desarrollo de la energía sostenible. Una vez firmado el Pacto de Alcaldes y asumido el compromiso político que representa, las ciudades invierten en un ambicioso programa de acciones energéticas locales. Todas ellas luchan por ofrecer mejores condiciones de vida a los ciudadanos y, con ello, mejoran la economía local y crean nuevos puestos de trabajo. Tanto en estas inversiones como en otras apuestas locales por la energía sostenible la financiación UE, procedente en su mayor parte de los Fondos Estructurales, ha desempeñado un papel fundamental.

En cualquier caso, según concluyeron los participantes en el debate, las ciudades precisan de medios para desarrollar todo su potencial como reductoras del cambio climático e impulsoras de la recuperación económica en Europa.

El Comisario de Energía de la UE, Günther H. Ötinger, señaló que “la fuerza del Pacto de los Alcaldes radica en su capacidad para unir las iniciativas locales y afrontar los retos energéticos a los que se enfrenta la UE. Las iniciativas locales son muy prometedoras; sin embargo, necesitamos hacer más y avanzar más rápidamente”, y anunció que, junto con el Comisario de Política Regional, Joannes Hahn, han trabajado para aumentar en interés por la política energética y las energías renovables en la política regional.

En el acto también intervinieron el Presidente del Parlamento Europeo, Jerzy Buzek, y la Presidenta del Comité de las Regiones, Mercedes Bresso. A juicio del primero, los Alcaldes del Pacto tienen por delante “una tarea importante e inmensa: es necesario que trabajemos juntos con el objeto de ofrecer a los ciudadanos soluciones a los problemas que más les afectan, como el cambio climático. Por ello, el Parlamento Europeo respalda plenamente los esfuerzos que se enmarcan en la iniciativa del Pacto de Alcaldes”, y añadió que la eficiencia energética es una de las prioridades de la institución.

Mercedes Bresso calificó “acierto” el Pacto de Alcaldes y aseguró que “nos encontramos en un momento ideal para que avance hasta el siguiente nivel, agilizando las inversiones en energía sostenible mediante un vínculo más coherente entre el Pacto y las posibilidades de financiación de la UE, y ampliando el alcance de la agenda global de eficiencia de recursos, sobre todo en lo que respecta a la gestión del agua y los residuos”.